Saturday, March 27, 2010

UN MUNDO NUEVO

¿Qué vendrá después de todo lo visto, de todo lo vivido? ¿Cómo será el mundo que sucederá la tormenta de violencia que hoy no cesa?

Debo admitir que en un principio yo era un escéptico. Tenía la idea de que el país vivía horas malas pero que sólo eran ruido de fondo pero intermitente. Lamentablemente la realidad se ha encargado de desmentirme ya que, no hay duda de ello, la cantidad de muertes se ha disparado duplicando una tendencia que ya estaba el declive desde hacía muchos años.

Y no sólo en cantidad. Ahora la violencia toca las puertas de cualquier sitio.

Leo los análisis de expertos que dicen que esperemos sentados porque esta carnicería podría tomar una década hasta que la cosa mejore. Hay quien dice que la cosa empeorará mucho antes de comenzar a mejorar. Hay quien señala que las cosas no son tan malas después de todo, que ya llegará el momento en que todo se tranquilice y que las cosas volverán a la normalidad.

Lo dudo. Difícilmente México volverá a ser el mismo tras esta guerra civil sin nombre. Cuando por agotamiento de los combatientes o por la victoria de alguno de los bandos en conflicto las balas terminen su reinado, tendremos un país lastimado, una nación que no podrá mirarse a la cara, que estará avergonzado de haber permitido que esto hubiera sucedido.

Los juicios no serán suaves con el presidente. Hay quien dice que esta era una guerra de imperiosa necesidad. Que la sobrevivencia del país dependía de librar esta batalla. Hay quien sostiene que el presidente actuó como un hombre a quien le vendieron un remedio fácil para una legitimidad herida.

Cualquiera de estas opciones deja en mal a la presente administración: para bien o para mal se interpretará su actuación como la de un incendiario quien pasó por una aldea de casas de paja corriendo a toda velocidad sin más idea que la de sus convicciones alucinadas.

Las fuerzas armadas, exahustas y desgastadas probablemente volverán a los cuarteles cansadas, hartas y quizá con un gran rencor para con el gobierno civil que les puso en una trinchera para la que no estaban preparados. Aceptemos el hecho: nuestro ejército estaba preparado para rescatar personas en inundaciones y armar refugios tras huracanes, no para librar una guerra de baja intensidad por todo el país con una fuerza armada que no sólo le alcanza sino que por poco le supera.

Las ciudades violentadas por las invasiones bárbaras se encontrarán con la nada fácil tarea de reconocerse a sí mismas. Monterrey descubre en estas horas que la violencia encontró un caldo de cultivo inmejorable con su sociedad estratificada, donde cientos de miles de personas marginadas sólo cobraron importancia cuando se unieron a los ejércitos del crimen organizado.

Quizá tendrá que operar un proceso de reconciliación social como el que sucedió tras el genocidio de Ruanda: millones de personas muertas por sus propios vecinos, amigos y hasta familiares. Descubrir que el enemigo es la imagen inversa del espejo no será tarea fácil.

Finalmente, quizá en el largo plazo la sociedad descubra, de una vez por todas con esta brutal lección que el gobierno no es todopoderoso, que finalmente un país debe ser construido por sus ciudadanos y que de cualquier modo, sólo los mexicanos podemos hacer que la nación funcione y sea como lo deseamos.

Pero eso sucederá cuando las armas callen, lo cual, desafortunadamente tomará muchos años y vidas antes de llegar a su fin.

Thursday, March 25, 2010

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Ceviche de sierra
Salmon a la plancha con verduras
Agua mineral

.... delicias ocasionales del oficio.

Wednesday, March 24, 2010

CALOR

Es la hora del sopor. los transportes se mueven lentamente por las avenidas tartajosas. la gente se arrastra sin demasiadas ganas luego de pesadas comidas.

es la hora en la que la ciudad nos digiere a nosotros.

Saturday, March 20, 2010

LOS BARBAROS

A los estudiantes caídos

No quería escribir sobre temas de la triste realidad que nos ocupa, pero ya no puede eludirse este triste deber. Monterrey, una de las más importantes ciudades del país está enmedio de la guerra que al parecer la guerra toca las puertas de una ciudad otrora orgullosa de sí misma.

Es curioso como cambian las cosas: hará cosa de un año que estaba allí. Pasé un mes trabajando sin que nadie me dijera nada. Pese a las diferencias que para todo chilango representa habitar una ciudad que vive a caballo entre las montañas y el desierto, me pareció un lugar empeñoso y pese a todo, seguro.

Ahora, pareciera que leo crónicas de una ciudad enmedio de la guerra civil: bloqueos armados, balaceras que irrumpen la tranquilidad, granadazos repartidos en las esquinas de la ciudad.

Esta ciudad y el país entero paga (y pagamos) la cuota de sangre por los años felices de vivir de la mano de los criminales, aceptando su dinero, dándoles posada; ofreciéndole a nuestras hijas y hermanas como ofrenda a cambio de su oro y sus dólares.

Sin quererlo ni buscarlo, el día de la expiación llegó a nosotros repentinamente. Como un vendaval ahora la nación entera derrama su sangre y su felicidad, aterrorizados todos ante la llegada de los bárbaros, que ayer brindaban con nosotros usando las calaveras de sus enemigos y que hoy lo hacen con las testas de nuestros hijos, padres, hermanos y amigos.

RESCATE

El mundo revela sorpresas sepultadas en las arenas del tiempo y del olvido.

Regalos que no parecen otra cosa que bendiciones pequeñas que solo me atrevo a reverenciar con gran humildad.

Y digo, gracias.


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Sunday, March 14, 2010

MUNDO FLOTANTE

... En definitiva, seguir el camino de nuestras vidas como una calabaza que sigue el curso del año siempre flotando, aunque a veces parece que se vaya a hundir.

Eso es el mundo flotante.

Ukiyo monogatari (circa 1665)