DE OPCION MULTIPLE

A) El destino es extraño. Lo que ayer nos fue querido, hoy nos es apenas indiferente. El tiempo dicta veredictos extraños. Reencontrarse en los cajones con letras perdidas puede ser excitante, pero darte cuenta de lo mucho que cambian la tipografía con el tiempo deja un sabor mixto en la boca. Tan sólo de pensar que una I se puede convertir en B en apenas unos meses es algo de lo que aún no me recupero. Sin embargo, más me llama la atención cómo es que el tiempo nos cambia: de pronto aparecen lentes y coches. Pero si existe alegría en los labios y la tibieza de una vida que cambia, no me molestaré.

B) Curioso. De pronto lo que ayer era anodino, se convierte en centro de atención. Lo perdido aparece y de pronto me doy cuenta de que es posible hacerse de pequeños detalles, ligeros objetos de atención ajena que sirven, más que nada, para hacerse de un poco del pedestre orgullo de tener en la mano, objetos preciosos. Lo más satisfactorio es que dicho suele estar lleno de pequeñas satisfacciones. Dulce.

C) Está lo que uno se encuentra en el camino. Cambio de pluma y de trazo. Ahora colocamos la tinta suave, de trazo delicado, con inocentes ribetes y garigoleados. Es una faceta más de mi vida como hombre de letras. En esta opción, la satisfacción no estan inmediata ni develable. Es quizá la delicia de sentir cómo la muñeca se ejercita sobre el papel en blanco. Es al mismo tiempo una labor pedagógica y un ejercicio un poco hedonista. No deseaba que sonara de ese modo, pero definitivamente me hace sentir satisfecho.

Así es el examen... espero poder pasarlo más a menudo.