Pues bien, resulta que ahora estoy escribiendo este post ni más ni menos que desde la sección Premier del avión que me trae hacia México. Y si hace rato piaba por una experiencia mucho más “nais” de lo que era viajar, mi suerte se combinó con una oferta digna de tianguis turístico donde ofrecieron como oferta urgente y de último minuto un “upgrade” a clase premier en el boleto por 75 dólares.
Y como he estado ahorrando algunos pesos, decidí dar el tarjetazo y aquí me tienen, viajando en un asiento ancho, comfortable y sobre todo, sin soportar apretujones ni morosas situaciones incómodas.
En fin. Creo que ha sido un viaje de lo mejor, aunque quizá me remuerda un poco la conciencia el no haberle ayudado a una colega a pasar su fayuca. No es por mala onda, pero no se me dio echarle la mano. Ya había tenido suficiente con su desfachatez de pedir dos botellas de vino y dos de agua San Pellegrino a costa de los RP’s para su cena y que se hubiera aprovechado del chofer pa’ que la llevara de compras.
Como lo había señalado en post anterior, me cayó muy mal esa situación así que, con la pena. Ni modo. Además, viendo sus hábitos de consumo, quizá hubiera terminado como en uno de mis primeros viajes donde un colega tuvo la puntada de comprarse una computadora de escritorio con todo y monitor de 21 pulgadas... para que varios terminaran pasándola por la aduana: uno el CPU, otro el monitor, otro el teclado y etc.
Que le haga como pueda.
Y bueno, ahora que me encuentro volando, aprovecho la ocasión para pensar en algunos temas que desde lejos he tenido noticia:
El primero de ellos es la cuestión de los emos Vs punks en varias ciudades del país. Sin tener más información a la mano, no puedo dejar de pensar en lo extraño que me resulta que varias tribus urbanas hayan decidido organizar un bizarro pogrom contra los emos. En mi familia nunca se nos han dado estas excentricidades, pero en lo personal, siento que no tiene razón de ser esta siuación de animosidad contra otra tribu urbana.
Las explicacions que se han dado me parecen poco sostenibles ya que hablan de una confrontación donde se acusa a los emos de haberse robado elementos de otras tribus urbanas, lo que me parece imposible de comprobar porque hasta donde tengo noticia, ninguno de esos elementos está protegido por el derecho de autor.
Pero en cuanto investigue más sobre el asunto, me gustaría escribir sobre ello.
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