BARAJA NUEVA

Después del desmadre de la elección de nuevos consejeros del IFE y de la famosa reforma electoral, muchos se han quejado de que este asunto fue una cesión a todos los enemigos de Felipe Calderón y que fue algo por lo que no se está recibiendo contraprestación alguna.

Yo difiero.

Sin ánimo de ponerme en el papel de oráculo de Delfos chilango, tengo algunas reflexiones al respecto.

- Con el IFE de hoy día, ni Felipe Calderón ni el PAN podrán validar victoria alguna en las elecciones del año 2009.

- Felipe Calderón está entregando la cabeza del IFE y de sus consejeros porque quiere tener un IFE limpio de controversias; de polvo y paja para que no se repita el ruinoso precendente del 2006 en 2009.

- Felipe Calderón y el PAN quieren tener en 2009 el control de las cámaras legislativas.

- Felipe Calderón y el PAN quieren que la segunda parte del sexenio sea la de las famosas, mentadas y rogadas reformas estructurales que el país etc... y sobre todas las cosas, no quiere que nadie se lo impida.

... A mi juicio, por ello es que está entregando el IFE a los partidos. Para jugar exitosamente este sexenio, Calderón está repartiendo con baraja nueva. Así no tendrá el PRD ni nadie pretextos para discutir los triunfos que el PAN ya se saborea.

Que si gana esas elecciones futuras, será tema de otra discusión.

Además, por lo que veo, el asunto de estas negociaciones vertiginosas ha dejado un asunto benéfico. Por lo que parece, debajo de la rebatinga, el gobierno de Calderón y el PRD finalmente llegaron a ciertos acuerdos de fondo sobre cómo será la convivencia en los años por venir.

El mero hecho de que los llamados al bloqueo de la aprobación al aumento de las gasolinas por parte de AMLO hayan terminado en una suerte de sainete estéril, dejan claro que los ánimos han cambiado y que negociaciones (públicas o subrepticias) han dejado de lado al líder moral de la izquierda mexicana, quien cual Simón del Desierto tendrá que recorrer un prolongado camino para llegar a quien sabe qué Arcadia.