Friday, June 23, 2006

TIRANDO LA TOALLA

Pues bien señoras y señores, estamos a punto de llegar al final de la casi eterna contienda electoral, pero como sucede con las buenas obras de teatro, el nudo argumental se encuentra lo suficientemente enredado para que todos contengamos el aliento. Sin embargo, desde la casa presidencial de Los Pinos al parecer ya están curándose en salud por lo que puede venir.

Nombrar a Cuauhtémoc Cárdenas como organizador de los festejos del bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución considero que fue un reconocimiento tácito de que su partido no sobrevivirá las siguientes elecciones y en lugar de echar mano de algún patriarca panista, sino que prefirió hacer de Cárdenas el hombre que a lo largo del siguiente sexenio le será una especie de piedra en el zapato al Peje presidente.

De hecho, el que el mismo Cárdenas haya accedido a que Fox (un panista que siempre repudió) le hiciera esta encomienda, habla de las expectativas que el mismo alberga: sabe que a medida que pase el tiempo, su puesto cobrará relevancia y se convertirá en una suerte de contrapeso contra el poder que seguro el Peje tendrá el gran placer de ejercer a conciencia.

Así pues, con un acto mínimo (como diría Borges, echando una gota de agua al mar) Fox, en uno de sus quizá inexistentes momentos de astucia política, se prepara para hacerle las cosas difíciles al Peje, poniéndole su más acérrimo rival dentro de su propio equipo y a forzarlo a hablar con el, a acordar cosas con el, a ceder cosar hacia él. Un papel que al Peje nunca le ha gustado y que ahora tendrá que llevar a cabo por más dicha o desdricha que presente.

Apunte casual: El niño verde a las puertas de Los Pinos
Fue un encuentro totalmente desagradable, saliendo de la estación del metro Constituyentes (que forma parte de mi recorrido hacia la editorial para la que trabajo) me encuentro con que no puedo cruzar el puente previo a Los Pinos por el que suelo evadir las ríadas de furiosos coches que impunemente se pasan por los huevos el semáforo que está allí puesto, a las puertas de la casa presidencial.

Pues sí señores. El bloqueo tenía como motivo una trinchera elevada por guardias presidenciales debido a que el nene verde se encuentra haciendo un plantón en la explanada de la estación del metro. Y me lo voy encontrando, desparpajado concediendo una entrevista con su cara de fuchi, acompañado por algunos de sus canchanchanes en lo que el sol de la tarde terminaba de broncearle un lado de la barba a medio crecer (supongo que para hacer patente su indigencia huelguística).

Un poco asombrado de toparme así con el presidente de un partido político en una faceta que más que compasión despierta ganas de mentarle la madre, escuchaba un sonido de fondo, una especie de ronquido persistente. Pues bien, el señor tiene una planta de energía eléctrica a pocos metros de su plantón, supongo que para no perderse los partidos de la selección nacional en pantalla de plasma (que no vi, por cierto).

Mejor aún, preocupado por la salud de su intestino grueso, el tal niño verde se las arregló para rentar varios baños portátiles, pero no tuvo ni siquiera la decencia de cubrir que uno de los trailers dice ni más ni menos que “baños de lujo”, así, sin el menor deseo de limitarse nen nada. En los periódicos he leído que ese pequeño lujo le cuesta al Partido Verde (y por antonomasia a nosotros) miles de pesos al día. Yo no sé como es que alguien puede creer que este partido defiende las causas ecologistas cuando emplea sin mayor empacho una planta de energía eléctrica propulsada a diesel o sanitarios que emplean químicos para tratar sus desechos.

Apunte casual 2: la maestra en el Presidente
Yo no creía en la existencia de monstruos hasta que me topé con la maestra Elba Esther Gordillo a unas mesas de distancia en el lobby del hotel Presidente Chapultepec. Fue como encontrarme con un calamar gigante, restirado y de piel brillante. Cuidada por un escuadrón de guardaespaldas y rodeado de un séquito de maestros (eso supongo) que llevaban y traían papeles en presurosa sucesión.

Definitivamente un horror.

Apunte pambolero: victoria a la mexicana
De inmediato lo sentí cuando salí a la calle después del vergonzoso partido que México jugó contra Portugal. No hubo festejantes, ni personas mentándose festivamente la madre en nombre de la Selección Mexicana (¿por qué lo escribo en mayúsculas?) ni claxons haciendo patente su entusiasmo. Esta fue una victoria de horror. Que la afición mexicana ni siquiera hubiera querido salir a gritar un ¡viva México cabrones!, da una idea muy clara de lo que sucedió en el partido: los traumas nacionales a flote.

Ahora, con un partido frente a Argentina, los ánimos son poco festivos y en el corazón de la afición, en vez de la victoria, se espera una muerte rápida e indolora, que de preferencia nos evite la desgracia de pasar una vez más por agonía de los tiros penales, que al parecer ya se volvió el castigo designado por los diseñadores del Infierno para encerrar en él a los mexicanos pecadores.

Sunday, June 18, 2006

VAMOS, HAGAMOS UN TRATO

Un pacto secreto / De nosotros dos
Amanda Miguel

Cada candidato a la presidencia de la república saca el mismo argumento a colación: cuando ganen, convocarán a un gran pacto de unidad nacional para que el país deja atrás sus rencillas y se reincorpore en la labor fecunda y creadora, como decía Adolfo Ruiz Cortines en algún momento de su senecta presidencia, allá por los mediados del siglo XX.

Yo no sé ni por qué recurren a esta forma retórica de hacer política. Poco más o menos me imagino que los políticos se figuran esta clase de cosas como una suerte de ritual faraónico (preferentemente en el Palacio Nacional) donde TODOS los actores políticos de este país (desde clérigos hasta la Selección Nacional en pleno) sentados mientras en el presidium el presidente (obviamente el candidato se imagina a sí mismo en la gloria de su oscuro traje cruzado por la banda tricolor) pasan uno a uno a firmar el pergamino donde compromisos trascendentales (como no volver a entorpecer al presidente o sonreír para las cámaras asiduamente) son signados por cada uno de los personajes,

Pero lo mejor sucede afuera

Miles de personas abarrotan el Zócalo, gritando vivas al presidente a medida que pantallas gigantes muestran el desfile de signatarios. Finalmente, luego de algunas emocionadas palabras, el presidente camina lentamente con una carpeta de piel de escroto de rinoceronte bajo el brazo y sale por el balcón central del Palacio Nacional. La multitud (con una alegría mayor a la de la noche del 15 de septiembre) grita extasiada mientras el Presidente (ahora sí, con mayúsculas) muestra el documento y las vivas lo cubren. Las campanas de la Catedral Metropolitana resuenan a todo lo que da... y es el despertador que suena con intensidad.

Eso de convocar pactos, de juntar a todos los hombres de honra y pro del país para convocarlos a redactar, firmar y seguir un pacto con objetivos comunes es uno de los caminos seguros para no llegar a ninguna parte. Al menos en lo que tengo de vida, se han propuesto varios pactos nacionales (Pacto de Solidaridad Económica, Pacto para la Estabilidad y el Crecimiento Económico y más recientemente Pacto de Chapultepec) que se firman con gran bombo y platillo, para no llegar a nada. Algunos titulares de periódico se ocupan en el asunto, los columnistas se toman un par de días para decir lo mismo que yo (que los pactos no sirven para nada) y el país sigue su marcha inmutable.

No es de extrañar: uno de nuestros primeros acuerdos políticos (el Abrazo de Acatempan entre Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero) terminó con el fusilamiento de Guerrero por obra del caos político que trajo la última fase del período de la Independencia. Iturbide terminó igualito: fusilado depués de la locura de su intento de crear un Imperio Mexicano de opereta.

Así las cosas, los documentos firmados, refirmados y confirmados terminan sin tener un valor relevante en nuestra vida política. Porque simplemente no hay forma de hacer que la gente cumpla lo que promete cuando no hay ni castigo de por medio. Es una pena que las cosas sean así en México, pero así son y ni modo. Por ello creo que lo que mejor deberían hacer los candidatos en los pocos días que les quedan de campaña, es proponer las cosas que realmente está en su mano hacer. Las escenas cinematográficas, al estilo de la presentación de Simba en El Rey León no son más que sueños de opio para consumo presidencial.

Apunte pambolero: en lo dicho
Como se había previsto, el empate con Angola demuestra que las bravatas al calor de los tequilas no sirven de nada en la cancha de juego. Lo sabemos bien, el soccer mexicano es apenas lo suficientemente bueno como para pasar de panzazo, que nadie se sienta sorprendido.

Lo extraño, como cada Mundial, es que alguien se crea que tenemos madera de campeones y que podemos llegar tan lejos como nuestros sueños lo permitan. Eso sí que es Bailando por un sueño.

Tuesday, June 13, 2006

CONDECHI: RANCHO ALTERNATIVO

Yo se que cada ciudad necesita una zona donde los intelectuales y las almas sensibles puedan reunirse al amparo de un paisaje urbano hermoso para divagar, crear y descansar de la ciudad sin tener que pagar peaje para salir de allí. Este es ha sido el caso del Quartier Latin en París y el Greenwich Village en Nueva York, nomás para poner dos ejemplos.

Quiso el destino que nuestra versión local de barrio bohemio cayera en un lugar donde al menos hace 20 años nadie daba un peso por vivir allí. La colonia Condesa (a medio camino entre Insurgentes, Av. Chapultepec y el Circuito Interior) se ha convertido en sede del pensamiento literario y la sensibilidad artística... caracterizada por creativos publicitarios y ejecutivos de cuenta que suelen aprovechar la infraestructura restaurantera y antrera del lugar para hacerle la vida de cuadritos a sus residentes de larga data, que no parecen muy felices de tener que lidiar con la carga vehicular, la basura y el desgaste acelerado que sufre la colonia por la invasión de miles de personas que la usan como sede de sus ensoñaciones.

Me supongo que habrá quien ame a la Condesa con un amor indeclinable y a prueba de bombas, y lo mismo pasará con al menos un habitante de cada una de las 5,850 colonias que según el Guia Roji, forman parte de la ciudad. Sin embargo, la Condesa, ahora sede de la inteligencia chilanga, resulta que se ha convertido en una suerte de ghetto que teóricamente le pertenece a los intelectuales, cosa que dudo debido a las fuertes rentas (que hasta en dólares se llegan a cotizar) que se cobran por lo que en otras condiciones se denominarían buhardillas o arrinconaderos.

Sea como sea, en el lapso de algunos meses esta colonia ha sido bendecida por partida doble: por un lado con la inauguración de una librería sucursal del Fondo de Cultura Económica, mientras que por el otro lado se abrió un espacio denominado Centro de Lectura Condesa donde se supone se darán a conocer lecturas sabias y ponencias harto sesudas de mentes maestras en el andar de la letra y el poema. Curiosamente, ambas iniciativas fueron financiadas con dineros del gobierno (unos por parte del Fondo de Cultura Económica y por otro lado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes).

Por principio no podría protestar por acciones de este tipo. La cultura, donde quiera que se ponga, siempre es bienvenida. Librerías, centros de lectura, foros de cualquier tipo de arte son indispensables para mantener la buena salud mental de la urbe. Sin embargo pienso... ¿colocaron estos centros culturales en la colonia con mayor población intelectual del país (quizá rivalizando con Coyoacán) a pesar de que es uno de los lugares donde menos se necesitaría algo así, o precisamente por ello decidieron establecer dichos lugares allí?

Cada vez que llego a la estación del metro Rosario, me saluda el armazón a medio hacer de lo que se promocionó como un centro cultural para la delegación Azcapozalco. Como sueño de delegado, llegó la siguiente administración y se determinó que el lugar no era prioritario. Y allí se mantiene con su armazón oxidándose al aire. Más o menos sucede lo mismo con el cascarón de un cine allá por el rumbo del campus Zacatenco del Politécnico Nacional. Yo me pregunto si esa idea de expandir la cultura no significará otra cosa que complacer a algunos figurones de las artes de nuestro país y colocarles en la puerta de su casa un lugar para que puedan reposar de las batallas del espíritu... mientras enormes zonas de la ciudad siguen áridas (y ávidas de centros culturales de cualquier índole).

Apunte pambolero: y que gana México
Y la gente se lanzó a las calles a expresar su alegría. Y se vendieron millones de chelas extra el domingo. Y la playera verde ondeó cual bandera nacional. ¿Y el presidente? Enviando un mensaje motivacional a la selección mexicana, nutriendo esas expectativas de triunfos que vendrán cuando ni siquiera tenemos la seguridad de tales victorias. Nomás con ver a nuestros rivales (Angola hizo sudar a Portugal) nos augura partidos complicados y victorias que seguirán costando esfuerzo. Que nadie se confíe.

Friday, June 09, 2006

HERE COMES THE MAYO

Club sandwich, sandwich de cuates
mal movimiento y te llueven mecates

Así andan las cosas con lo del debate en estos días. Ahora si estamos viendo la artillería pesada de ambos bandos, misma que no se detendrá con niñerías como la honra o la ética. Si alguien tiene esqueletos en el clóset, mejor que los amarre con mecate porque en cualquier momento los sacarán a la palestra. Apenas antier Felipe Calderón era el representante de las manos limpias y ahora está enredado en un problema con su cuñado que al parecer le ha dado en la línea de flotación a su argumento. Los antecedentes con los niños Sahagún, los amigos de Fox y las toallas de a 6 mil pesos han creado una base tan vulnerable que tan sólo el hálito de la sospecha ha bastado para que Calderón se tambalee peligrosamente en la cuerta floja.

Por otro lado, Andrés Manuel López Obrador recibió (quien sabe de donde) un capote milagroso que le ayudó a torear lo que parecía ser una embestida por parte del señor de los videos. Un misterioso atentado a deshoras de la madrugada (clásico: no hay testigos, no hay evidencias, las versiones se contradicen peligrosamente) salvó lo que parecía una debacle en directo desde el Gólgota, cual novela de Gore Vidal.

Mientras tanto, Roberto Madrazo, quien esperaba levantarse como el vencedor del debate terminó encerrado en sus propia sobriedad y nada de lo que dijo ha quedado en la memoria. De los dos candidatos restantes, ni hablar: Patricia Mercado, inteligente pero irrelevante, mientras que Campa... el si ya quedó en el piso de la tabla general.

Se dicen que son los charolastras
ladillas, gandallas,manchados y lacras

Por otro lado, el ambiente general del debate fue tan sobrio que terminó convertido en una suerte de coctel soporífero que más que encender los ánimos, me apagó la energía para que la última media hora del debate me la pasara dormido. Sin embargo, debo decir una cosa: el público mexicano de debates es muy difícil de complacer. Si en el primer debate hubo mentadas de madre por racimos, la crítica dijo que estábamos ante una cena de cavernícolas. Ahora que la cosa transcurrió en lo general sin incidentes, la crítica es severa: el debate estuvo como clase en escuela de señoritas y mejor hubieran regresado a jalarse de las greñas. Quien nos entiende.

Y ahora el campo de batalla quedó listo para lo que será la confrontación última: la honestidad entredicha de Calderón contra la palabra del Peje. Quizá esta sea la batalla decisiva de la que se desprendan uno o dos puntos que separen al ganador del segundo lugar. Todo dependerá de lo hábiles que sean los contendientes al manejar esta papa ardiente.

Apunte pambolero: no más guerras por favor
De pésimo gusto me ha parecido la imagen visual manejada por Televisa para anunciar los partidos del Mundial. Ya están los ánimos lo suficientemente caldeados (en México y en el mundo) como para agregarle a las cortinillas una estética de conflicto bélico a lo que es una justa deportiva. Mensajes de este tipo sólo crean la idea de que esto del futbol es una cosa donde la honra nacional va de por medio y que los perdedores merecen el paredón de fusilamiento. Lo peor del asunto es que hay gente que se traga todo esto y luego se pone a vociferar como energúmeno en compañía de bestias semejantes.

Apunte guerrillero: esta vida de radical chic.
Las estaciones de radio semiclandestinas que apoyan al EZLN lo anunciaban como acto estelar de la Otra Campaña: la irrupción del Subcomandante Marcos en el debate, justo para dar el portazo hombro con hombro junto al Dr. Simi; era una promesa que los wires de noticias iban confirmando al calor de la tarde: el sup había salido de Ciudad Universitaria rumbo al WTC (sede del debate).

Pero algo pasó en el camino que ni las estaciones prozapatistas dijeron lo que había pasado con el Sup, ni las agencias noticiosas dieron nota de su paradero, abrumadas por trazar la nota de color para la noche que se prometía tumultuosa. Sin embargo, al día siguiente, mientras leía La Jornada, voy viendo que la noche del debate, el Delegado Zero andaba... ¡en la Colonia Roma participando en un foro sobre Bertolt Brecht! En efecto, el Sup estaba feliz de la vida en el presidium de la mesa discurriendo sobre diálogos hipotéticos entre Don Durito de la Lacandona y el dramaturgo foreado.

No se si el Sup se quedó al vino de honor, pero aún no se me quita de la mente la idea de que un día de estos me toparé al Sup en algún cafecín de la Condesa mientras debate con meditadores profesionales al amparo de un espresso y su inseparable pipa. Lo interesante es que le diremos hola y nos contestará amablemente mientras le da un sorbo a su cafecín.

Por si no me creen, les dejo la liga con la foto
http://www.jornada.unam.mx/2006/06/07/a12n1cul.php

Sunday, June 04, 2006

DOS DIAS PARA PENSARLO

Apenas vengo de pasar un par de días en un hotel - spa de Cuernavaca, sufriendo los rigores del periodismo (un hotel con un jacuzzi sultanesco, estanques con pececitos, bufet de comida orgánica y habitación con sonido ambiental de cantos de ballenas sin televisión) y atendiendo un seminario bastante interesante, cuando a mi regreso la ciudad me recibe con sus brazos abiertos... descomponiendo el microbús con el que llegaba a casa y regalándome un chubasco a medio camino.

Nada es gratis en esta vida.

Regresando a los debrayes de un servidor, tenemos como novedades del día los preparativos de los partidos políticos hacia el debate del día martes; mientras que un artículo de Enrique Krauze causa oleajes debido al trabajo bibliográfico que le dedicó a Andrés Manuel López Obrador (http://www.letraslibres.com/index.php?art=11289).

Sin entrar a la disección del artículo (que debería estar a cargo de historiadores de profesión), me pongo a pensar lo importante que la biografía de un personaje público influye respecto de lo que le sucede en el futuro. Esa biografía se complementa por un interesante documental sobre el experimento tabasqueño a principios siglo de un cacique revolucionario llamado Tomás Garrido Canabal, y emitido por desgracia, en las altas horas de la madrugada.

Impresiona saber lo que puede hacer una persona cuando todos los hilos del poder se encuentran en su mano. El tal Garrido Canabal se lanzó a un experimento intentado siglos atrás por Vasco de Quiroga en Michoacán y décadas despúes (con horrorizantes resultados) en Camboya: crear sociedades nuevas, de hombres limpios de todo pecado, de todo atavismo y llenos de un viento nuevo, puro y sobre todo, justo y progresista. Los resultados nunca fueron duraderos (en Michoacán los virreyes se encargaron de arrasar el experimiento social de Tata Vasco), mientras que en Camboya el regimen de los comunistas lidereados por un tal Pol Pot creó un genocidio que se cobró ni más ni menos que el 20% de la población nacional, pasando al paredón personas cuyo pecado era tener gafas o saber leer.

En cuanto a Garrido Canabal, el hombre decidió abolir la religión y otros vicios como el alcohol y las francachelas. El problema es que lo hizo, no convenciendo a la población u obteniendo su aprobación, sino organizando a la población de manera vertical (es decir, a huevo), creando un sistema educativo acorde a la visión del cacique, aboliendo la religión, prohibiendo el alcohol y formando un movimiento de masas (llamados camisas rojas) para mantener la pureza del movimiento y el acatamiento de sus dictados revolucionarios. Años después, su fanatismo antirreligioso lo llevó a ordenar una matanza de católicos en 1934, aunque su error fue llevarla a cabo no en sus tierras, sino en la Ciudad de México, donde su influencia no era tan poderosa y terminó por sellar su camino rumbo al destierro en Costa Rica, donde murió.

El problema no radica en las ideas que los hombres en el poder tengan; al fin y al cabo había monstruos como Hitler que era vegetariano, mientras que se dice que el presidente americano Ronald Reagan era fanático de horóscopos y pitonisas. El problema (y quizá el auténtico peligro) es cuando un país carece de contrapesos que permitan poner límites a las ideas y las excentricidades del poder. A mi no me preocupan los planes de Calderón, Madrazo, El Dr. Simi, Paty Mercado o el Peje; a mi lo que me pone los pelos de punta es que el ánimo de las elecciones se ha vuelto tan complejo que es posible que a la larga, los sistemas de control del poder ejecutivo penosamente construidos en las últimas décadas terminen demolidos por efecto de la erosión política estimulada por nuestros propios gobernantes.

Apunte personal: un año de lluvia
Ha pasado un año desde que tomé algunas decisiones en mi vida. Perdí a una persona muy amada, mientras que decidí cortar por lo sano otro vínculo sentimental que llevaba pudriéndose más de una década. Ha pasado el tiempo y, cada vez más cerca de mi tercera década de vida pienso que no hay mal que por bien no venga. No diré que he adquirido un conocimiento zen de la existencia, pero al menos puedo caminar por la vida sin sentir que tengo amarradas las manos frente al destino.

Pero a veces la soledad se presenta. Ni modo.

Thursday, June 01, 2006

VILLAMELON PAMBOLERO

Para Pasqui, que te recuperes rápido y la banda también.
Para Luis G., felicidades por la paternidad.

Pues si, yo siempre me he mantenido al margen de la euforia pambolera. De hecho, ese deporte me causaba muchas molestias en mi niñez, cuando por obra de la transmisión de los partidos de la primera división, me quitaban mis sesiones de caricaturas. Era un horror.

Actualmente, el soccer me sigue valiendo madres del mismo modo que sucedía cuando era escuincle. Sobre todo, ahora que con el paso del tiempo me he dado cuenta de que los fanatismos que despierta no sólo son inútiles sino que nocivos. Es conocido el caso de dictaduras como la argentina y nuestro nacionalista ogro filantrópico, que sacaron provecho de mundiales y selecciones para crear una cortina de humo frente a diversas atrocidades. Incluso dos países centroamericanos, El Salvador y Honduras, se enfrascaron en una guerra (así como lo oyen, una guerra con tanques y todo) debido a un resultado desfavorable durante una eliminatoria mundialista allá en la década de 1960.

Sin embargo, debido a que el tema del deporte de las patadas se ha convertido en un asunto casi de seguridad nacional (desde los candidatos a la presidencia y hasta el círculo rojo en pleno no cesan de hablar del tema), y estimulado por una conversación con un querido editor, me veo obligado a dar mi opinión pambolera en pleno.

En lo personal, creo que, para variar, la Seleccion Mexicana se está dejando llevar por el inmoderado optimismo que le es común en estos casos. De una manera injustificada ya se hacen (como cada cuatro años) cuentas alegres y se espera que lleguemos mínimo a la segunda ronda. Como efecto colateral, los comerciantes se han lanzado al abordaje de la suculenta presa mundialista y no cesan de aprovechar la devoción por la camiseta tricolor para vender de todo: desde televisores y sistemas de TV de paga, hasta bebidas energizantes (nomás faltan los condones tricolores).

Yo no se de dónde salió la idea de que la seleccion jugara una retahíla de partidos de entrenamiento allá en las Europas. Si lo que se deseaba era foguear a la selección, más bien la están incinerando en leña verde. Con la derrota gris contra Francia, el ánimo nacional está de capa caída, y sin siquiera comenzar los partidos oficiales, ya han surgido broncas con el entrenador de la selección y a lanzarse mentadas transatláticas entre jugadores. Eso claro, antes de otro partido contra Holanda, que seguramente será otro parto de los montes.

Como suele suceder en estos casos, ya se prepara el escenario conocido de nuestra participación mundialista (que por cierto, se asemeja mucho a nuestro ciclo político): expectativas más allá de lo humanamente posible, que al ser echadas por tierra, generan el deseo azteca por sacrificar en el altar de Huichilobos a los jugadores de la selección en pleno. Y creo que, considerando que los jugadores de la selección son tan mexicanos como nosotros, es injusto pedirles el milagro de que hagan milagros, siendo que cargan a sus espaldas los traumas de más de 130 millones de connacionales (contando a los mexicanos en Estados Unidos).

Apunte político: por mi raza hablarán las bigotonas
Sólo en México pasan cosas así, un cantante llamado Tiziano Ferro se avienta la puntada de decir que no encontró mexicanas de su agrado porque vio puras bigotonas que no le llenaron el ojo. Punto y aparte de la validez de su dicho (nomás recordar que uno de nuestros íconos femeninos, Frida Kahlo solía lucir con gran orgullo su mostacho), la reacción nacional sorprende por lo pueblerina y traumatizada.

Una asociación gremial de intérpretes ha declarado que impedirá que el tal señor Ferro actúe en el país por sus declaraciones mexicanas. Un locutor mañanero por poco y llama al linchamiento del cantante de marras, acusándolo de antimexicano y usando como pieza de artillería el viejo argumento de que “si no le gusta el país, ¿para qué viene?”. Inclusive una especie de ONG dedicada a juntar a las mujeres feas del país, se siente compelida a decir que defenderá de la ofensa extranjera del extraño enemigo que se atrevió a poner en entredicho la mítica (y en ocasiones hercúlea) belleza mexicana.

Yo pienso que esto sólo denota nuestras inseguridades mentales. Cuantas veces hemos hablado de otras nacionalidades con gruesas mofas y adjetivos. Desde los aparentemente inocentes chistes de gallegos-argentinos-chinos, pasando por las cotidianas mentadas de madre frente a nuestros gringos vecinos. El grupo Molotov ha escrito canciones bastante agresivas (remember, pinche gringo puñetero) y hasta hoy no se han oído reclamaciones; para nuestra fragilidad mental basta un empujoncito para que se desmonore cual si fuera turrón.

Y así queremos ganar el Mundial.