Sunday, August 12, 2007

EL PERIODISTA TECNOLOGIZADO

Hubo una época donde el ejercicio del periodismo se bastaba con una libreta y un lápiz. Eran los tiempos legendarios donde la memoria era herramienta privilegiada y casi única. Quizá los únicos auxiliares permitidos eran una taza de café, una cajetilla de cigarrillos y en caso extremo una máquina de escribir. Eran los tiempos donde el periodista, en potencia, podía ocultar un superhéroe.

Medio siglo después, ¿cómo va la cosa?

Debido a los peligros de demanda por parte de las fuentes, a la necesidad de tener un registro minucioso de todas y cada una de las fuentes consultadas (en caso de factchecking) y a los requrimientos propios de un oficio en evolución, este 2007 un reportero debe contar con por lo menos dos herramientas fundamentales:

- Una grabadora
- Una computadora

Y en el diplomado que estoy tomando, una de las grandes lecciones aprendidas es que se requieren cantidades masivas de tecnología para tener en orden el trabajo. No es que la libreta haya sido exiliada (de hecho la uso y mucho), pero ante las necesidades de organización del tiempo y de la información, se ha vuelto de necesidad indispensable poseer más herramientas.

Comencemos:

Una computadora de escritorio: MacMini para más señas, con un monitor de 17 pulgadas, lo suficientemente grande como para escribir en Word (programa obligatorio para redactar textos), aunque quizá en el mediano plazo termine requiriendo más espacio de monitor y comprar uno de pantalla ancha y 21 pulgadas.

Un computadora portátil: MacBook com procesador Intel Core 2 Duo. Es la máquina más nueva que poseo y cuando salgo de viaje es la unidad espejo con la que opero mis asuntos fuera de la ciudad. El unico problema es que esa máquina genera tanto calor que también tengo que cargar con una base que evita que me queme las piernas y me rostice los espermatozoides.

Una grabadora: En mis primeras épocas usaba una grabadora de microcassette, pero el año pasado me regalaron una grabadora digital, que es una delicia de usar; una vez grabados los archivos, se pueden descargar en la computadora y realizar el tedioso espoteo de la grabación de forma digital. Además, se pueden ubicar los puntos de interés en forma precisa (con hora, minuto y segundo) en lugar del uso impreciso del indicador de la grabadora de cassette. Ahorra tiempo.

Una agenda electrónica: Se puede tener el mejor tema, pero sin una agenda electrónica, es casi imposible mantener el paso. La Tungsten TX con la que trabajo no sólo es agenda y calendario electrónico. También me sirve como terminal emergente de correo electrónico y web (cuando estoy fuera de casa y cerca de un hotspot WiFi) y en caso de emergencias, con un teclado portátil, puedo emplearla como procesador de palabras con el programa Documents ToGo con la que viene equipado.

Cámara fotográfica: No soy fotorreportero, pero el instructor del diplomado en el que estoy metido lo ha sugerido. Tomar fotos, no para tener el retrato, pero sí para recordar ambientes y otras situaciones de los lugares donde uno se halla. supongo que usaré la Panasonic Lumix que me compró mi madre hace milenios.

Esto es en cuanto a los tornillos. Ahora pasemos a los programas

Microsoft Office: No me gustan las cosas de Microsoft, pero es preciso usarlo. Word es un procesador de textos al que le he encontrado equivalentes ligeros y decorosos como el Nisus Writer Pro, pero Word sigue siendo en estándar y mejor ni moverle.

Mail: El programa integrado de Mac para leer correos electrónicos es básicamente fantástico.

Adium: Un programa con el que se puede trabajar al mismo tiempo con MSN Messenger, Yahoo Messenger, Gtalk, ICQ y otros protocolos exóticos de comunicación para mantenerme al pendiente de mis relaciones con amigos y editores.

Net News Wire: Cuando era estudiante, en la biblioteca había una computadora de pantalla negra y verde a la que le llegaban los cables de la agencia Reuters. Ahora este programa me permite suscribirme a los feeds de noticias de cientos (así es, cientos) de fuentes de información, que se pueden actualizar hora tras hora. Por ejemplo, en este momento estoy suscrito a 107 fuentes que contienen 3,291 noticias. Suficiente para pasarme mañanas enteras leyendo cosas.

Notae: Otra orden del instructor, llevar un diario de trabajo de cada tema. Pensé en hacerlo en formato blog, pero como soy muy celoso de mi privacidad, no creo que convenga poner en línea mis procesos de trabajo. Este programa hace lo mismo, pero me permite hacerlo en mi propia máquina.

xTime Project: Antes de conocer este programa, me era casi imposible tener una idea del tiempo que me tomaría hacer un artículo. Ahora puedo planear con cierta certeza (valga la expresión) lo que me tomará escribir un artículo, estimando el tiempo promedio que me tomarían los diversos procesos des elaboración de cada artículo. Mejor aún, el programa me permite ver todos los artículos que tengo que trabajar de forma simultánea.

MindManager: Mi último descubrimiento y quizá el mejor programa que he descubierto en años. Permite hacer bocetos conceptuales de los artículos, agregarle links de interes y notas que vayan surgiendo al vuelo de manera esquemática y tener un diagrama detallado de los avances en la redacción del artículo (en ocasiones una de las más difíciles tareas de explicar al editor) y mantener el trabajo bajo control.

Cosas de la tecnología, pues.

No comments: